El Plan de Desarrollo Institucional se ha convertido en la bitácora que nos muestra la ruta por la cual debemos, no solamente caminar, sino trabajar para la consecución de los objetivos misionales que la Funlam se ha trazado y que nos lleva a comprender la importancia que tiene el ser humano en toda su dimensión.

Los logros obtenidos cada año son el esfuerzo de un grupo de personas comprometidas con la transformación de un modelo educativo que busca, desde el desarrollo de sus funciones sustantivas de Docencia, Investigación, Extensión, Internacionalización y Bienestar, impactar la sociedad y formar, de paso, seres humanos íntegros, críticos y comprometidos desde su quehacer profesional en la construcción de una sociedad más justa y civilizada.

El balance que se presenta  en cada periodo da cuenta de las cifras y hechos más significativos que, desde las funciones sustantivas, la Luis Amigó ha ejecutado durante 365 días. En él se ve reflejado todo nuestro esfuerzo en temas relacionados con la cuantiosa inversión para el mejoramiento de nuestra propuesta educativa y la prestación de un servicio con altos estándares de calidad, la proyección y el progreso Institucional, que obedece a un pensar colectivo y cuya organización estratégica por ejes y procesos, muestran una Universidad pujante y en constante desarrollo.

Nuestra misión, visión y principios institucionales, están orientados a descubrir la riqueza de nuestros estudiantes, el profundo compromiso y sentido de pertenencia de todos nuestros empleados, el constante desarrollo académico de nuestros docentes, la pertinencia de nuestro quehacer investigativo y la relevancia de nuestra proyección social.

El balance es la voz amigoniana traducida en acciones de cambio y transformaciones en distintos niveles, que engrandecen día a día a la Fundación Universitaria Luis Amigó, Institución de Educación Superior que ha sabido comprometerse durante tres décadas, con la realización del ser humano y cuya historia se sigue escribiendo para el beneficio de nuestra sociedad.